El paciente bajo el microscopio
Noelia recibió una ayuda de la Fundación Mutua para poner en marcha un estudio en cáncer de colon en el INCLIVA de Valencia.
Cuando Noelia se sienta en la consulta a ver pacientes con diagnóstico de cáncer de colon lo hace sin bata y les avisa de que les va a tutear, así tengan 90 años. “No quiero que sientan que marco un estatus, no me gusta. El cáncer tiene de por sí una connotación en la que piensas en muerte y yo intento simplificarles la vida”.
Esta actitud no es la única que define a Noelia Tarazona, oncóloga del Hospital Clínico de Valencia e investigadora del Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA. Su vocación por investigar, por encontrar respuestas que ayuden a sus pacientes es otro de sus rasgos. Es ese afán investigador el que le llevó a conseguir una Ayuda a la Investigación en Salud de la Fundación Mutua Madrileña.
“No quiero que sientan que marco un estatus, no me gusta. El cáncer tiene de por sí una connotación en la que piensas en muerte y yo intento simplificarles la vida”.
“A veces me encuentro en la situación en la que la enfermedad de mis pacientes ha progresado a todos los tratamientos disponibles y ya no tengo más que ofrecerles, lo cual es desolador, porque te tienes que sentar delante de él y decirle que no hay nada más que hacer. Dejar que una persona se vaya a su casa pensando que se va a morir es muy duro. Y no poder ofrecer nada más es frustrante, por eso investigo”, cuenta.
Investiga también porque ha aprendido la profesión con dos mentores, Andrés Cervantes y Ana Lluch, que han hecho de la investigación su bandera y que son referente internacional no solo en oncología, sino en el trato al enfermo. El doctor Cervantes me decía: “¿Tú quieres ser de las que leen los artículos científicos o de las que los escribe?”. La respuesta ya la saben.
“Ayudar a los pacientes no consiste solo en sentarte en una consulta y poner una quimioterapia, tenemos que conocer el cáncer desde dentro y ello supone investigar, estar en el laboratorio, aprender sobre la célula, ¿qué le pasa? ¿por qué progresa en algunos pacientes?… estas preguntas nos llevarán a pedir proyectos de financiación porque tenemos una pregunta que queremos contestar para ayudarles”, explica Noelia.
Gracias a la Ayuda de la Fundación Mutua Madrileña Noelia investiga si se puede recuperar la pérdida de la expresión del gen CDX2 pues se asocia a recaída de la enfermedad y mal pronóstico. Lo estudia en su laboratorio con muestras de sus propios enfermos y lo hace en colaboración con biólogos y gente de otras especialidades, incluso de otros centros, porque “uno solo no avanza”. “En la enfermedad sea cual sea, las células son mucho más listas que todos nosotros. El conocimiento unido es lo que permite que estemos progresando”, explica.
En su investigación Noelia trata de entender por qué algunos pacientes pierden la expresión de este gen, que ya sabe que es por causas epigenéticas (del ambiente) y si se puede recuperar con algún fármaco. Si se recupera la expresión del gen, ¿volverán a tener estos pacientes mejor pronóstico?, intentan responder.
Muchos casos en jóvenes
El contexto de los avances en cáncer de colon hoy en día no es halagüeño. Desde 2020, explica Noelia, no se ha lanzado ningún fármaco nuevo en pacientes metastásicos y los que lo han hecho aportan un beneficio en supervivencia muy limitado. Por otro lado, la incidencia del cáncer de colon está aumentando cada vez más en la población de menos de 50 años. “Queda mucho campo por pensar, colaborar, investigar y descubrir… Y de ahí nuestro ansia de pedir financiación, pensar qué más podemos hacer y siempre con el optimismo de que alguna de estas investigaciones nos permita encontrar un fármaco que les aporte algún beneficio”.
La Ayuda de la Fundación Mutua Madrileña fue la primera que recibió Noelia como investigadora “adulta”. Antes había habido muchas becas gracias a estar en el equipo del Dr Andrés Cervantes. “Pedías una beca avalada por él y el éxito lo tenías asegurado, pero llega un momento en que tienes que independizarte. Justo el año de la pandemia yo solicité muchas ayudas, pero cuando es la primera vez y no tienes un currículo que te apoye como investigador, es difícil conseguirlo. Por eso, cuando alguien confíe en ti por primera vez es un momento muy especial”. Y esto le ocurrió con la Fundación Mutua Madrileña, “era mayo cuando recibí el email (de la fundación) y solo puedo agradecer la confianza por apostar por jóvenes investigadores que empiezan y que no tienen un background porque contar con el apoyo la fundación me avaló para poder conseguir otras ayudas”.
“Ahora toca conseguir resultados, publicaciones y que se vea que esta apuesta ha podido tener un impacto en los pacientes”, prosigue.
A Noelia, la vocación por la medicina y por las personas le viene de siempre. La carrera le llevo a la Oncología que reconoce que le ha hecho evolucionar mucho como persona. “Soy muy afortunada por convivir con la muerte, porque me sitúa en la vida. La Oncología me ha permitido saber que el tiempo es relativo y que hay que aprovecharlo. La enfermedad golpea a cualquiera a cualquier edad”.
Recuerda a Pau Donés, que fue paciente de cáncer de colon, y su lema de “Vivir es urgente” porque como dice Noelia “el momento es siempre. La cosa es querer o no querer”.